LAS CINTAS DE JHON WAYNE GACY

 


John Wayne Gacy fue un asesino que operó en Illinois (Chicago) durante los años 70 y que se destacó por tener un perfil muy claro en cuanto a las preferencias con sus victimas. Le gustaban los jóvenes adolescentes varones y se aprovechaba de su trabajo en una compañía de construcción para asesinar a la mayoría de sus víctimas. La ineficacia de las autoridades junto a su buena suerte y reputación evitaron que fuera capturado durante muchos años a pesar de que tuvo varios encontronazos con la ley. 

En su tiempo libre, a Gacy le gustaba actuar como payaso en los cumpleaños de los niños de su localidad o también en labores de ejercicios de caridad en los hospitales. Es este el detalle que le otorgaría después su apodo como asesino: “Pogo, el payaso asesino”.



DATOS DEL ASESINO

A pesar de casarse en 1964 con su compañera de trabajo, Marlynn Myers, sus primeras experiencias homosexuales tendrían lugar durante ese mismo año. Durante 1965 se mudaría a Waterloo (Lowa) para dirigir los restaurantes KFC de su suegro. No esperaría ni un segundo antes de unirse a la Cámara Júnior de los Estados Unidos de Waterloo, donde ganó la admiración de todos los miembros y varios reconocimientos por diversos méritos.




EL PRIMER ATAQUE

En 1967 fue su primer asalto sexual. Donald Voorhees era un adolescente de 15 años, hijo de uno de los miembros de la Cámara Junior de Waterloo. Gacy convenció al joven de ir a su casa con la promesa de ponerle una película pornográfica. Una vez allí emborrachó al joven Voorhees y lo coaccionó para que le practicase sexo oral. Pero Gacy no estaba satisfecho y durante el transcurso de esa semana asaltó a otros jóvenes del distrito.

Donald Voorhees habló más tarde sobre el asalto sexual con sus padres y éstos llevarían el asunto a la policía. Gacy fue arrestado por abusos e intento de secuestro. En septiembre de ess mismo año, Gacy contrataría a un sujeto para que le diese una paliza a Donald Voorhees y evitara que este testificara en su contra. No obstante, el joven Voorhees logró escapar y avisó a las autoridades. Su atacante fue arrestado y ello llevó después a la detención de Gacy, quien fue ya obligado a someterse a evaluación psiquiátrica.



SENTENCIAS

En 1978 secuestró a su última víctima, Robert Piest. El joven tenía 15 años y trabajaba en una farmacia, donde Gacy le habló de que contrataba jóvenes para su empresa de construcción. Después de que éste hablara con su madre por teléfono acerca de cambiar de trabajo, nunca más volvió a casa.

La policía contactó con John Wayne al haber sido la última persona en hablar con el chico, pero este dijo que no sabía nada. Sin embargo, por primera vez la policía no creyó su historia y decidieron investigar sus antecedentes, solo para darse cuenta del largo historial de corrupción de menores que Gacy arrastraba. La policía entró al domicilio de Gacy con una orden de registro, donde encontraron varios objetos incriminatorios como joyería perteneciente a los jóvenes, documentos de identidad, ropa de hombres de tallas que no concordaban con la del propio asesino, esposas y jeringuillas.

El 25 de diciembre Gacy confesó todo y el número de cuerpos en su casa era tan grande que se necesitaron de varios meses para sacarlos todos. Se halló un total de 29 cuerpos, el resto habían sido arrojados a un río porque se había quedado sin espacio. John Wayne Gacy fue sentenciado a muerte el 12 de marzo de 1980. A pesar de que intentó apelar en numerosas ocasiones, fue ejecutado por inyección letal el 10 de mayo de 1994.


DOCUMENTAL EN NETFLIX


Las cintas de John Wayne Gacy. A lo largo de tres episodios, el director Joe Berlinger retrata la historia de uno de los peores asesinos en serie de la historia de Estados Unidos. En la década de los 70, el hombre violó y mató a más de 30 hombres, entre jóvenes adultos y adolescentes, mientras que, paralelamente, se presentaba ante sus vecinos como un sujeto ejemplar.

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